Puchas que me gusta Diego y Glot. O me gustaba, debería decir. Hasta donde sé, no lo repiten en la programación actual. Por lo que he leído, se supone que en el 2007 vendría una nueva temporada y una película (para cosechar la fama de Pulentos), cosa que nunca fue. Parece que el ponerle atención al público infantil pasó de moda, o al menos fue reemplazado por el modelo Amango. Lo que me entristece, ya que ese es un modelo exportado de USA (High School Musical y demás) y dudo que veamos tanta personalidad en esos programas como la que se veía en la generación 31 Minutos.
En corto: Diego y Glot se trata se las desventuras de la familia Plá Perez, exponentes clásicos de lo que podríamos llamar chilenos medios. Viven en un barrio que podría ser cualquiera entre D y C2, tienen un auto chico pero fiel, se reúnen en familia (y vecinos) para el Clásico. El protagonista es Diego, niño de 10 años, y su perro verde Glot. ¿Por qué es verde? Nunca se explica… sería el elemento realista mágico, el único por suerte. Se retratan sus vecinos, sus amigos del colegio, y las cosas que le pasan, típicas y no tanto de los cabros de 10 años.
Lo que nos lleva al tema: ¿Por qué me gusta tanto? (y el tema secundario: ¿Porqué vale la pena escribir sobre unos monitos animados acá?) Y yo diría: por la capacidad de los creadores para representar la realidad nacional (bueno, santiaguina). Todos los detalles son algo que hemos visto o vivido: desde el liceo semi-subvencionado Pablo Neruda hasta el tipo que camina por Ahumada con 35º encima y revienta. Diego y Glot está repleto de lo que podría llamar idiosincrasia. Y no es la típica idiosincrasia despectiva que muestran los chilenos cuando crean algo, sino una idiosincrasia hecha con cariño.
También está la representación de nuestros íconos Pop: podemos ver a Don Francisco, a los Prisioneros, al perro Lenteja, a Pedro Carcuro, y un largo etc. de personajes de la memoria colectiva. Toman el ejercicio pop de recolectar modos, prácticas, símbolos y empaquetarlos como testimonio de su existencia, y lo hacen con éxito. Se cuenta la historia que no saldrá nunca en los libros de historia, y que es igualmente importante.
En el debate sobre la cultura chilena y cómo los malvados gringos nos la quitan, por lo usual se refiere a la cultura desde el punto de vista humanista, o sea la producción cultural de alto valor reflexivo y emocional (y que sea buena también). Nadie considera a la cultura en el sentido de las ciencias sociales, como las cosas que vemos y practicamos en la vida cotidiana. Pues sepan que la cultura son todos esos símbolos, lugares comunes y referencias. Nuestra alta cultura es escasa, y nuestra cultura popular se reduce a la producción de los años
En la serie otro tema presente es la competencia de “lo chileno”, inmerso en un contexto de imperialismo cultural (ya se imaginarán de donde). Y no, no se hace a través del típico ladrillazo nacionalista-revolucionario. El mensaje se encuentra en los detalles: en la frase que exclama Diego al final de un episodio (“al final, prefiero chilito… ¡Mira papá, un mall!), en las “sopaipillas a domicilio y con salsa BBQ”, en el paseo a
Aunque nostálgico en su contenido (la infancia de Diego se parece harto más a la mía que a la de su público objetivo), Diego y Glot tiene una sinceridad y positivismo hacia lo que somos y lo que seremos.
[1] Miren el caso Japón: después de la segunda guerra, absorbieron como esponja casi todas las costumbres norteamericanas; hoy en día tienen unos objetos culturales tan idiosincrásicos que son pocos los que entienden cual es su parada.
3 comentarios:
Pero Don Graf es un personaje norteamericano. McGruff se llama originalmente.
Estimado, ese es exactamente el punto. Cuando se importa a McGruff, se hace necesario el transformarlo y localizarlo. Ya sea en su lenguaje, en sus consejos (porque los patrones que llevan al consumo de drogas no van a ser los mismo en Chile y USA) o en su marketing, la transición cultural requiere que sea chileno. Así como el viejo pascuero es un personaje de la mitología germánica, o la esvástica es un símbolo hindú.
Se viste como McGruff, piensa como McGruff, pero NO es McGruff. Es Don Graf.
yo creo que todos somos gay
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